No quepo en mi de gozo y agradecimiento porque ha vuelto.... después de casi cinco meses de baja, vino justico 8 días, a pasar el rato que no a trabajar y pasado ese momentico se piró de vacaciones, pero todo lo bueno se acaba, y de nuevo contamos con la inestimable presencia, que no colaboración, porque eso no sabe lo que significa, de “El Supergrandilocuentetodolosabe Machoman”..........gracias mil a este Señor por:
Darnos la oportunidad de aprender a diario aunque sean cosas que ni nos van ni nos vienen.
Darnos la oportunidad de aprender a diario aunque sean cosas que ni nos van ni nos vienen.
Enseñarnos que es un reloj atómico y dónde se encuentra.
Oír de lejos los mil y un tipos de conexiones a wifi que existen.
Aportar lo que sabe de psicología, con sus palabros técnicos que se ha empollado ayer para soltarlos hoy.
Volver a escuchar expresiones tan afables a sus inferiores como: “ Fulanito, te das un salto y vas a ver” lo que sea que toque en ese momento una tele, un teléfono cualquier cosa, el tema es el trato como si estuviera hablando con ranas, sapos, saltamontes, piojos o canguros, que no se como se lo aguantan y no le mandan a tomar......por el mismísimo... un café.
El escalofrío nos entra al volver a oír esa frasecilla tan alegre de: “ p’habernos mataoª, y ese run run de fondo con esa voz altanera y siempre como si diera una clase de cátedra para que se escuche desde la China Oriental o las Antípodas hasta Marte, tan irritante y que nos hace tanto daño en los tímpanos que vamos a necesitar unos cascos para que no sufran nuestras orejas, ni nuestro cerebro.
O ese alardeo de macho ibérico y mentiroso compulsivo, que nos cuenta que no le pueden poner anestesia por una enfermedad bastante rarita que dice tener, pero que para operarle de próstata si se la pusieron, y para sacarle una muela no y que el dentista, cual torturador de la inquisición cogió sus alicates y se la arrancó no de un tirón que sería lo lógico, sino de a pocos, de tirón en tirón, se cree que somos idiotas ¡en qué quedamos leche!.
De verdad que no entiendo que mal hemos hecho mis compañer@s y yo para merecer este castigooooo, si esto vale como penitencia ya podemos hacer lo que nos dé la gana porque estaremos súper perdonad@s.
Esta vez ha vuelto para quedarse y hacernos el día a día lo más insufrible que pueda, lo bueno es que no sabemos por cuanto tiempo tendrá su merced a bien quedarse.
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