A lo largo del tiempo ha cambiado la forma de guardar los textos, la música y las imágenes. Las cintas de audio, “casetes”, ya dejaron paso al CD y al DVD. Las cintas de video han dejado paso al DVD e incluso al pen-drive. Al hacer limpieza de objetos viejos uno se plantea si tirar lo que tenía porque ocupa más espacio y en algunos casos ya no se puede reproducir. Se puede actualizar en el formato de los mismos contenidos.
Los textos que estaban en papel y en dikettetes de 5 ¼, luego pasaron a 3 ½, luego a los cds y dvds, además de los discos duros. Tiro folios escritos y voy actualizando en sucesivos formatos los archivos.
Se hace difícil desprenderse de los objetos viejos.
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