De casta le viene

El arte se lleva en la sangre, es de esas cosas que se tienen o no, en su caso no hay duda, es hereditario, con la peculiaridad de saltarse una generación, la mía, mas concretamente a mi. Su abuela le ha contagiado esa pasión que de haber nacido en otro tiempo u otra circunstancia la hubiera llevado a ser protagonista de culebrón, bailarina de Fama o finalista de OT, pasando por escritora o pintora, cualquier disciplina le viene bien y en todas ha picoteado.
Este sábado fuimos a ver otra de esas obras de teatro en salas diminutas en las que mas parece que uno este en una cena de nochevieja y los actores, familiares con alguna copilla de mas.
Como es preceptivo, en un momento dado piden la participación del público menudo y de entre los cuatro valientes, esta, como no! Víctor.
Le tira la farándula desde la primera vez que vio una cámara, tengo una grabación suya en la que se le ve tocando un organillo musical con solo cuatro meses, le falta tiempo para imitar a cuanto bailarín aparece por la TV y de momento solo se corta si, cansino de mi le insisto en que vuelva a hacer tal o cual monería para presumir de padre de la criatura.
De momento como todo buen hijo va eligiendo aquellas aficiones que menos tienen que con las de sus progenitores, fútbolista, áctor, músico. ¿quien da mas?
Se admiten apuestas.