Navalcarnero.

En el segundo domingo de cada mes, recuperando la vieja tradición de los pueblos, Navalcarnero monta su mercadillo, pero ahora ya no se venden gallinas, ni cerdos, ni productos de huerta en temporada como antaño, ahora hemos pasado a la artesanía de los hippies modernos, donde mas allá de lo que venden, lo verdaderamente interesante son ellos mismos, primero observas el género (su arte), luego el entorno, y por ultimo te recreas en su imagen, algunos perfectamente asesorados para componer ese look entre radical ecologista y bohemio de alta montaña, otros simplemente siendo fieles a su forma de vida, comer para vivir y no vivir para comer.

Para terminar la estampa acudió a la plaza la banda municipal interpretando para el deleite del respetable algunas composiciones. A destacar la fusión entre la orquesta tradicional y la batería popera ubicada al fondo pero con destacada notoriedad.